Poner en marcha un programa de reuniones periódicas entre centros y servicios para conseguir una mayor coordinación en los objetivos comunes.
Regular, en un plazo de 6 meses, la jornada flexible en sus distintas modalidades, dando seguridad jurídica al personal al conocer los criterios para optar a ella.
Dar autonomía a los responsables de personal en centros y servicios para la adecuación de la jornada, siempre dentro del marco normativo general.
Flexibilizar el disfrute de los días de asuntos particulares, permitiendo que puedan tomarse por horas de acuerdo con las necesidades de los servicios.
Negociar un plan piloto de la semana laboral de 4 días para analizar su viabilidad y extensión a otras unidades organizativas, respetando el número de horas de trabajo por semana y garantizando que los servicios se presten de lunes a viernes.
Avanzar hacia un modelo de carrera horizontal que permita capitalizar los conocimientos adquiridos mediante el trabajo diario y así minimizar el riesgo de perder dicho conocimiento experto por cambios de puesto.
Establecer un sistema de valoración capaz de medir cómo se ha desempeñado el puesto y cómo de preparado se está para seguir desempeñándose.
Elaborar materiales de apoyo para la mentorización.
Conseguir que en cada unidad, servicio o centro haya mentores especializados que, además de transferir el conocimiento necesario, acojan al personal que se incorpore y les ayuden a la integración en el equipo de trabajo.
Garantizar un período de mentorización específico para puestos de especial responsabilidad.
Una universidad que contribuye al desarrollo integral del PDI, que garantiza su relevo generacional y que le acompaña a lo largo de su crecimiento profesional